Todas las comunidades, de
norte a sur, tienen su comida típica según el clima y los frutos de la tierra y
el mar. A la mesa larga de Chile llegan los platos más autóctonos y ancestrales
junto a los que las diversas colonias de inmigrantes han aportado a la cultura
gastronómica del país.
También hay influencias
árabes y europeas, como la francesa y alemana. De modo que un plato típico
nacional, como la cazuela, tiene características distintivas según la localidad
donde se prepare. La diferencia la hacen principalmente los ingredientes.
EJEMPLOS:
La cazuela está en todo el territorio. Sin
embargo, en la zona central brillan las humitas, preparadas con choclo, que así
se llama al maíz fresco y tierno. Se ralla y queda como una masa a la que se le
agrega un poco de cebolla picada. Una porción de choclo se envuelve en las
mismas hojas de la mazorca del maíz, se amarra bien y cada humita queda con una
forma de mariposa. Se cuecen en agua hirviendo con sal. Luego se escurren y se
sirven. Pueden acompañarse con ensalada de tomates, por ejemplo; y hay quienes
las prefieren con azúcar.
La humita es una versión mestiza del pastel
de choclo, que tiene la misma base más una presa de pollo y los
componentes del relleno de la empanada (pino, pasas, aceitunas, huevo), y se
sirve en una fuente de greda. Tanto o más apetecido es el mote con
huesillos, una bebida refrescante, no alcohólica, que puede ser
o un buen postre de verano o consumir incluso en la vía pública, ofrecido en
carritos especiales cuando arrecia el calor. Mote es una palabra de origen
quechua y aimara que denomina al trigo cocido; el huesillo es el durazno seco
que, al cocinarlo, se mezcla con el mote. Esta bebida se sirve fría.
En
el sur frío y lluvioso, un alimento típico y bien consistente es el charquicán,
que se sirve caliente y despide un aroma cálido y apetitoso. Se prepara con
carne, cebollas, papas, zapallo, ajos y aliños varios, entre otros el ají de
color. Los ingredientes, muy trozados, se fríen y luego se hierven. El nombre
proviene del charqui, carne con sal que se seca al sol, alimento principal de
los viajeros.
En
el sur, especialmente en la costa, se preparan guisos parecidos, los que en
lugar de carne llevan cochayuyo, un alga marina.
Más
al sur, Chiloé invita a un delicioso curanto que se prepara en un hoyo en la
tierra y si se hace en olla se denomina pulmay. El cocimiento lleva mariscos,
carnes de ave, cerdo y pescado; legumbres, choclos partidos y panes hechos con
papas, llamadas milcao y chapalele. Todos los ingredientes se ordenan en capas
cubiertas por hojas gigantes que evitan que se escape el vapor.
Por: Tais y Tamia